miércoles, 21 de abril de 2010

Palm 2

Entonces lo que es la publicidad de boca en boca, es más efectiva que la de televisión, toda la raza ahí en el pueblo traía la onda de -oye, ¿sabes a quién vamos a lanzar de alcalde? Al Mon, y el Mon ni sabía ni se había dado cuenta, ni se había enterado, pero un día cayó allá a la cantina, al Foco Rojo, que esta en la zona, aquí es la zona rosa, allá el color es un poquito más subido, pero más decente que la de aquí, cuñao. Total llegó el Mon a la cantina del Foco Rojo, abrió las persianas y estaba lleno de raza adentro de la cantina, nomás lo vieron llegar y empezaron a codearse todos, -Oye, ahí viene Mon, cuñao -¡Pos que hable Mon! -¡Qué se aviente Mon, raza! Y Mon se aventó al tablao, ni Tardo, ni Perez Oso, nomás llegó al tablao y el primer discurso extraoficial que se aventó ahí pa' la raza, les dijo -¡Raza! No soy rico, no soy pobre, no soy guapo, no soy feo, ¡he dicho! - ¡Bravo! ¡Bravo! Mon se calentó cerró la cantina de una patada y le dije al mesero -Oye, ¡échate una parada pa' toda la raza y échate otra pa' ti! Los del partido dijeron -Oye, este vato cuenta con simpatías aquí en el pueblo, vamos a tener que lanzarlo de candidato, total pos ahi lo administramos, lo asesoramos, total pos ahí que los agarraron y lo lanzaron de candidato pa' alcalde.

Mon (Palm 1)

Esta es la historia de Mon, me la robé de Pato Machete.

Palm 1

Bueno pues, este, cuando llegó el momento aquel donde se hace la euforia política, allí en pueblo de Tunalguilla, Nuevo León, pos los del partido andaban un candidato pa' lanzarlo de alcalde, entonces pos el boticario quería ser candidato pa' alcalde, el licenciado también, el de la gasolinera, el tendero, oye, toda la raza, entonces los del partido dijeron -oye, pos ora sí se pudo difícil la cosa hombre, todo mundo quiere ser candidato a alcalde y el más optimista del partido le dijo, -oye cuñao, pos en ese caso lanzamos a Mon. Mon es un primo mío que se llama Simón Leal, nomás que de cariño le dicen Mon, el vato no sabe nada de política, pos el fabrica escobas, lo que pasa es que el vato es buena bestia, nomas que le falta el cuido.

domingo, 18 de abril de 2010

La sonrisa

Es de común experiencia que toda risa contenida se deshace en sonrisa, y toda sonrisa acentuada se desata en risa. Estas relaciones fisiológicas no deben turbarnos. En concepto, como quiere Bergson, podemos considerar que la risa es una manifestación social. La sonrisa es solitaria. La risa acusa su pretexto o motivo externo, como señalándolo con el dedo. La sonrisa es más interior; tiene más espontaneidad que la risa; es menos solicitada desde afuera. Así, aun cuando se considere que son grados o momentos de un mismo proceso, el análisis de la sonrisa nos lleva a las fuentes espirituales; el de la risa, a los motivos externos. Los motivos podrían variar: como no nos pertenecen, no son absolutos. La fuente espiritual, que traemos con nuestro ser, no puede variar: es absoluta. La sonrisa es, filosóficamente, más permanente que la risa.

Alfonso Reyes

:) (sabes lo que significa)


Post dedicado a la Chida.

martes, 13 de abril de 2010

El poder del periodismo

La siguiente es una transcripción de un texto de Javier Dario Restrepo. Durante las 22 páginas anteriores habla de las responsabilidades éticas del periodista y el poder del periodismo en la sociedad. Les recomiendo leer todo el texto, pero si quieren solo un poco esto es, a mi gusto, lo mejor.

(SPOILER ALERT, SI VAN A LEER TODO EL TEXTO, NO LEAN ESTO)

la versión completa puede ser descargada en PDF aquí o en Word aquí.

Cuestión de Ética
Javier Darío Restrepo

En Bogotá estuvo el director del único periódico que sobrevivió la guerra en Sarajevo. Yo había leído la existencia de este señor a través de un libro donde se coleccionan todos los editoriales que este hombre escribió mientras Sarajevo estuvo estremecido por la matanza salvaje que hubo en esa ciudad, alimentada por odios étnicos y tradiciones. En nuestro encuentro aproveché para preguntarle sobre una ocasión muy dramática descrita por él, que fue cuando las balas y el odio se volvieron contra el periódico y lo incendiaron. Era un espectáculo deprimente ver cómo ardían 30 años de esfuerzos, cómo se derruía su edificio, se perdía la maquinaria y desaparecía el formidable archivo.

Él, viendo la desilusión de todos los periodistas les preguntó: "Y ¿ahora qué?" Se sorprendió cuando le respondieron "ahora... a preparar la edición de mañana". Esa respuesta sacudió a todo el que estaba allí; buscaron lugares para levantar los textos y dónde poder hacer la edición. Total que al día siguiente, bien temprano por la mañana, todos los periodistas salieron a vender el periódico.

La gente hizo largas filas frente a cada uno de ellos para poder comprar el periódico. Y me dice este hombre "y yo era consciente de que muchas de esas personas sólo tenían dinero o para comprar el periódico o para comprar el pan del día, y preferían comprar el periódico". Sorprendido le pregunté, y ¿cómo se explica eso? Me dijo, "pienso que en una situación de crisis la gente puede vivir sin pan, pero no sin esperanza".

La gente está necesitando con una urgencia superior a la del pan que haya quién le fortalezca la esperanza. Lo peor que le puede pasar a nuestras sociedades es que la gente caiga en la desesperanza de no ver por dónde salir. La gran tarea investigativa de todo periódico y de todo periodista es buscar posibilidades y, por consiguiente, apuntalar la esperanza de la sociedad. Ese es el gran poder que tenemos en las manos. Nosotros podemos precipitar a la sociedad en la desesperanza o la podemos encumbrar en la esperanza. Son estos dos elementos nuestro verdadero poder.